Proyecto de innovación educativa para que jóvenes de contextos vulnerados que estudian en la educación superior desarrollen habilidades blandas utilizando la realidad virtual como catalizador de espacios reflexivos, de aprendizaje, motivacionales y de cambio actitudinal, por ejemplo, las sesiones de reconocimiento de emociones, cambio de paradigma, trabajo en equipo, liderazgo, Motivación y voluntad, y autoconocimiento, entre otras.
Este proyecto no reemplaza el rol del capacitador, sino que abre espacios para generar conversaciones, diálogo y guía en el aula, donde la experiencia de realidad virtual es una plataforma para estimular el aprendizaje y la participación juvenil, y conectarse con la tecnología como una herramienta útil para los estudiantes.
Este modelo permite la creación de escenarios específicos para cada temática tratada y además posibilita levantamiento de información instantánea sobre los avances y opciones que los jóvenes van tomando en cada sesión que cursen.